Las trabajadoras del cuidado directo ayudan a que el hogar sea un lugar seguro y pueden salvar la vida de consumidores en situaciones de emergencia. Mientras hace sus quehaceres cotidianos es importante tener conciencia de las potenciales amenazas de infección y gérmenes; el contacto con cualquiera de estas puede ser dañino para su salud y la del consumidor. Hay medidas de seguridad que se pueden tomar para reducir el riesgo de contagio y detener la propagación de infecciones y gérmenes, previniendo así que usted o la persona consumidora se enferme.